COMO USAR TUS LENTES DE CONTACTO


A la hora de ponerlos: Ten cuidado de no atrapar el lente de contacto o el ojo con las uñas. Recuerda colocar tu lentilla del ojo derecho siempre en su lado del estuche, igual que tu lentilla del ojo izquierdo del otro lado. Antes de ponértelos comprueba que no estén dañados o al revés (el lente debe tener la forma de una taza. Si está al revés tendrá la forma de un platillo, con los bordes hacia afuera). Enjuágalo con solución salina y colócalo en la punta del dedo índice de su mano dominante. Tira del párpado inferior hacia abajo con el dedo medio de la mano dominante y levanta el párpado superior con la otra mano y coloca suavemente el lente en el ojo sin pestañear.
Cuando hayas terminado de ponértelos, cierra los ojos lentamente y parpadea suavemente un par de veces.

A la hora de quitarlos:
Para quitarte los lentes blandos, mantén la cabeza hacia abajo y mira hacia arriba.
Separa los párpados de la misma manera que antes y desliza el lente sobre la parte blanca del ojo. Luego pellizca suavemente el lente con la yema de los dedos pulgar e índice.
Para quitar los lentes duros, coloca tu dedo medio y anular en la esquina externa del ojo y tira de tus párpados hacia tu oído parpadea el lente debería salir, recuerda almacenar tus lentes adecuadamente.

LENTES DE CONTACTO EN ADOLESCENTES


La confianza de los adolescentes es muy primordial, y su aspecto juega un papel importante en el. Es normal que tu hijo te pida usar lentes de contacto a temprana edad, y es totalmente natural que estés preocupado.
Debes tener en cuenta que no existe una edad mínima para usar lentes de contacto, todo depende de la madurez y la responsabilidad de tu hijo. Si crees que es capaz de cuidar sus lentes de contacto, entonces está listo para ellos. La adaptación a los lentes de contacto depende del individuo, sin embargo las personas que han utilizado los lentes de contacto Anyday quedan satisfechos, pues consideran que son bastante confortables.
Los lentes de contacto pueden ayudar a cambiar de look, así como también permite practicar actividades físicas sin tener que renunciar a tus ojos. Si tu hijo practica algún deporte o le gusta pasar el tiempo al aire libre, es una buena opción optar por los lentes de contacto.
Si te preocupa que a tu hijo se le pueda quedar el lente de contacto detrás del ojo puedes relajarte. Eso nunca podría pasar, pues existe una barrera de la membrana que no lo permite. Si aún no estás convencido, puedes permitirle a tu hijo probar por un tiempo nuestros lentes de contacto.